Pablo Neruda en Morelos
Prólogo
Por Gunther Castanedo Pfeiffer[*]
Mario
Casasús es un entusiasta estudioso de Neruda. Ha realizado una serie de
entrevistas que en su conjunto proporcionan detalles preciosos e
imprescindibles que ayudan al retrato completo del poeta chileno.
Además
son varios los libros que ya ha publicado sobre Pablo: El doble asesinato de Neruda (en coautoría, 2012), Pablo
Neruda en Morelos 1941-1966 (2016) y La
gestión de la Fundación Neruda, una mirada crítica (2006).
El
primero abordó el controvertido asunto de la muerte del poeta, el 23 de
septiembre de 1973. La tesis del libro, el asesinato del poeta, es defendido
por los dos periodistas con encendido encono. Muchos otros de los que nos
dedicamos a estudiar la vida del poeta nacido en Temuco, opinábamos de manera
contraria. No se trataba de una postura política, sino de un análisis frío de
circunstancias.
Junto
a la teoría del posible asesinato de Neruda, otros temas como la Fundación
Cantalao y el papel que la Fundación Pablo Neruda desempeñó en el cumplimiento
de los deseos del autor de Residencia en
la tierra, con respecto a su herencia, la antología popular y el fraude de
su edición en una conocida editorial, han sido puntos que Casasús abordó con
pasión y con el lema, todos al agua.
Casasús
es una referencia a través de sus trabajos para todo el que quiera profundizar
en la vida del Premio Nobel chileno.
Hay
una gran pregunta sobre quién es el mayor poeta de América. Y muchas
respuestas, todas ellas válidas. Hay quienes dicen que el peruano Vallejo. Pero
otros les contestan que no tiene obra. Otros prefieren a Borges. Y surgen voces
que elevan a Paz. ¿Y Neruda?; ¿y Darío? Nadie duda en poner al nicaragüense entre
los grandes de América. Nadie duda en Neruda. Pero Borges tiene mucho de
europeo. Y Darío, gran renovador, presenta un lado parecido. Es Neruda el más
americano de los grandes. Es su Canto
general, la crónica y geografía americana. Está toda su poesía atravesada
por los ríos, bosques y mares de Chile.
Neruda,
el viajero, acumuló paisajes, gentes, sabores, climas en un almacén interior
(estercolero, a veces, lo llamaría Juan Ramón Jiménez). A lo largo de su poesía
se fueron derramando esos países conocidos; esas experiencias salieron una y
otra vez. La luz de Ceilán, el aire seco de Castilla, las uvas de Italia...
México,
país en el que estuvo como Cónsul y que luego visitó en otras ocasiones, lo
deslumbró. Amó sus mercados, su geografía y el temperamento de sus gentes.
Es
México y el estado de Morelos el material que Casasús analiza metódicamente.
Partiendo
de la llegada a la capital azteca, a continuación va estudiando los hitos
principales de su estancia en el "país amado", deteniéndose con
singular interés en varios momentos.
El
primero de ellos es el atentado por elementos nazis a Neruda. Es estudiado todo
lo ocurrido en Cuernavaca. Casasús escudriña en la hemeroteca de la prensa
escrita, en biografías sobre el poeta, como la espléndida de Edmundo Olivares,
y en varios testimonios de Poli Délano y de su padre.
Tirando
de todos estos hilos consigue elaborar un relato coherente de los hechos que
allí acaecieron y de los personajes que estuvieron involucrados. De esta
manera, consigue rescatar la figura de Enrique de los Ríos. Este personaje
quedaba en una confusa sombra, debido a un olvido de la memoria de otro de los
testigos de aquel hecho, el niño Poli Délano. Casasús con encomiable espíritu
de profundizar en la verdad, importunó, preguntó, escudriñó hasta llegar a
establecer la historia tal y cómo ocurrió.
Este
atentado al que se supo sacar provecho político fue internacionalmente conocido
y sancionado. Los escritos de adhesión vinieron de todo el mundo y de todo tipo
de sectores, intelectuales, obreros, europeos y americanos, maestros y mineros,
cubanos y peruanos.
En
un segundo apartado se analizan los poemas morelenses de Pablo, recogiendo de
las investigaciones de Marco Antonio Campos y del propio Casasús, un amplio y
exhaustivo índice. Casasús ha estudiado la poesía referente a México y ha
dejado de lado el aspecto de la escritura no poética de Neruda, o sea
artículos, entrevistas, discursos, etcétera en que el chileno se refirió al
país azteca.
No
falta el aspecto de Neruda en relación a la gastronomía. Se detiene, tomando el
testimonio, una vez más, de Poli Délano, sobre la debilidad y audacia del poeta
chileno frente a la cocina; recoge anécdotas muy graciosas sobre las
peculiaridades inescrupulosas de Pablo a la hora de comer insectos. El detalle
de Delia del Carril, mujer de amplios mundos, pero que no los llevaba a su dieta,
muy sana, por otra parte.
El
matrimonio con Delia del Carril es uno de los aspectos más importantes de este
libro.
Neruda
quien se había casado en 1930 con María Antonieta Hagenaar y de la que se había
separado de forma oficial según las leyes de México en diciembre de 1936,
seguía teniendo un impedimento para formalizar la relación con la argentina
Delia.
Morelos,
nos revela Mario Casasús, le proporcionó el elemento perfecto para el divorcio
de su primera mujer y posterior matrimonio. Existía en Morelos una ley que
permitía el divorcio, incluso si una de las partes no estaba presente en los
juzgados.
Este
estudio de la ley general y de los detalles del divorcio de Neruda se antoja
uno de los elementos más novedosos de este libro. Se nos presenta en facsímil
la reproducción del acta de matrimonio. Por cierto con aparición de nuevo, del
ingeniero agrónomo Enrique de los Ríos.
Por
caprichos del azar, este divorcio y posterior matrimonio no son aceptados por
las leyes chilenas, lo que provocará que en 1948, cuando el gobierno de
González Videla haga llegar a Maruca a Chile para acusar al poeta de bigamia y
así desprestigiar al senador Neruda, quedará exento de tal acusación, al
entender los tribunales que no había bigamia por no estar reconocido el matrimonio.
Otros
de los ricos estudios de Casasús son la relación de Neruda con Siqueiros y a
través de éste la relación con su estudio de pintura "La Tallera" y
la visita que Pablo realizó en el año 66. Fruto de esta profundización nos
queda la datación exacta de una serie de fotografías entre ambos genios de la
poesía y la pintura, que hasta ahora quedaban en un confuso encuadre
cronológico.
Se
termina el libro con dos estudios, uno el del Casino de la Selva, sitio que
degeneró a la par que el hotel Amatlán, escenario del atentado de Cuernavaca y
que Casasús ubica geográfica e históricamente.
El
otro es la recogida del hecho bien conocido del intento del gobierno de México
de llevar a Pablo y a su tercera esposa, Matilde, a su país tras el golpe de
estado del 11 de septiembre de 1973.
Casasús
recoge en este libro, pues, todos los detalles de la fraternal relación de
Neruda con México y concretamente con el estado de Morelos.
Con
un estilo periodístico y rico de palabras, la lectura nos hace comprender más
claramente esa relación y las huellas que dejó en su poesía y los rastros
depositados en su vida.
Un
espléndido trabajo de un estudioso y apasionado nerudiano.
[*]Santander,
España (1957). Autor de los libros: Un triángulo literario. Pablo
Neruda, Miguel Hernández y José María de Cosío (2005), Pablo Neruda en Santander (en coautoría,
2008), Neruda y los barcos (2010), y
los primeros volúmenes de la enciclopedia: Personario.
Los nombres de Neruda (2011-2015).